Mientras surfeaba por internet en busca de nuevas fuentes inspiradoras, me tope con un curioso artículo que decía que Chaplin En 1921 viajó por Europa y un teatro decidió organizar un concurso de imitadores de Chaplin, presentándose centenares de imitadores del gran Charlot. Charlie se presentó de incógnito, con un nombre falso, y perdió (ironías de la vida) El ganador fue un payaso catalán que se hizo célebre, el no menos grande Charlie Rivel. Cuando terminé de leerlo me reí alrededor de cinco segundos y seguidamente comprendí que todas las buenas anecdotas resultan ser las más extrañas, como tropezar con tu perro al salir de la ducha (por poner un ejemplo)
Sin embargo eso no evitó que nuestro querido Chaplin no dejara de ser el mejor actor que el cine mudo y el mundo han conocido.
No hay comentarios:
Publicar un comentario